Málaga a, 10 de abril de 2023.
Queridos hermanos:
Un año más, como indica esta tradición cuatro veces centenaria, los archicofrades del Paso y la Esperanza hemos vuelto a procesionar por las calles de Málaga para que el Dulce Nombre de Jesús Nazareno del Paso, ante la atenta mirada de su madre de la Esperanza, nos dé a todos su bendición.
Aunque han pasado cuatro días desde que se produjeron estos momentos, todavía resulta complicado despojarnos de la ilusión y la emoción por todo lo que hemos vivido esta Semana Santa. El impecable discurrir del cortejo nazareno, filas compactas y bien formadas, la manera de procesionar de los tronos, la puesta en escena, la actuación de las bandas… Todo lo que formó parte de la procesión son argumentos para sentirnos orgullosos de pertenecer a esta corporación.
Quiero agradeceros la disposición, el saber estar, el esfuerzo y el sacrificio desde que entrasteis por la puerta de la Basílica hasta el encierro en el salón de tronos, llevando a gala unos colores que son la seña de identidad. Muy especialmente quiero agradecer a todas las personas que trabajan todo el año de manera altruista, restando tiempo a sus familias, trabajo y ocio para engrandecer aún más si cabe la Archicofradía.
Me despido de vosotros con las palabras del papa Francisco durante la bendición Urbi et orbi: “Es Pascua, que significa “paso”, porque en Jesús se realizó el paso decisivo de la humanidad: de la muerte a la vida, del pecado a la gracia, del miedo a la confianza, de la desolación a la comunión. En Él, Señor del tiempo y de la historia, quisiera decirles a todos, con alegría en el corazón: ¡Feliz Pascua!”.
Sin más intención que reiterar el agradecimiento sincero a todos los hermanos, pido al Dulce Nombre de Jesús Nazareno del Paso y a la Virgen de la Esperanza para que nos protejan a todos.
Atentamente,
Sergio Morales Millán.
Hermano Mayor